Imaginario
Durante las sesiones que dedicamos a la cultura visual de uno mismo, se nos propuso realizar un imaginario, en el que se nos daban a elegir algunas optativas y ejemplos. Yo terminé decidiéndome por el fotocollage, ya que me pareció algo bonito, extravagante y motivador.
Realicé dos, uno como boceto, y el otro ya más trabajado y elaborado, puesto que ya tenía clara la idea que quería plasmar.

En esta primera imagen, quise jugar con los cuadrados que ya de por sí había en la fotografía para engañar al ojo humano. Aunque casi no se aprecia, estilicé mi figura estirando las piernas, yaciendo algo más grande mi cara para que se apreciasen mis rasgos y además alargué el columpio también hacia arriba.
En este fotocollage, me inspiré, como antes he dicho en una serie de imaginarios que el profesor nos sugirió visualizar.
Para hacerlo, tomé varios segmentos de la misma fotografía y los fui pegando. Algunos de forma desordenada, algunos a modo de extensión de algún elemento, otros tapando trozos de la fotografía original....
El programa que utilicé para hacerlos fue Photoscape. La última versión disponible, ya que me parece un programa que para ser gratuito, es fácil de manejar y permite muchas opciones, pudiendo conseguir un efecto casi profesional si nos lo proponemos.
Comentarios
Publicar un comentario